¿Qué son los divertículos?

La diverticulosis es la enfermedad del colon más frecuente en Occidente y llega a afectar al 10% de la población. El 50% de los mayores de 50 años presenta divertículos.

 

Los divertículos son bolsas abultadas y pequeñas que se pueden formar en el revestimiento de nuestro sistema digestivo. Por lo general, se encuentran en la parte inferior del intestino grueso (colon). Los divertículos son comunes, en especial luego de los 40 años, y rara vez causan problemas.
Sin embargo, en ocasiones se inflaman o se infectan, a esta situación se la conoce como diverticulitis. La diverticulitis puede causar dolor abdominal intenso, fiebre, náuseas y un cambio marcado en nuestros hábitos intestinales.
El dolor, que puede ser constante y persistente durante varios días, se suele sentir en la parte inferior izquierda del abdomen, sin embargo, a veces, puede ser más intenso en la parte inferior derecha.
La diverticulitis leve se puede tratar con reposo, cambios en tu dieta y antibióticos. La diverticulitis grave o recurrente puede requerir cirugía.

 

¿Cuándo debemos consultar con el médico?

Es IMPORTANTE buscar atención médica siempre que tengamos dolor abdominal constante e inexplicable, más aún ante la presencia de fiebre y estreñimiento o diarrea.

 

¿Cómo podemos prevenir la diverticulitis?

  • Hacer actividad física con regularidad. El ejercicio favorece el funcionamiento intestinal normal y reduce la presión dentro del colon. Tratemos de ejercitarnos al menos 30 minutos la mayoría de los días.
  • La vacuna antigripal trivalente incluye un virus de la influenza A (H1N1), un virus de la influenza A (H3N2) y un virus de la influenza B.
  • Comer más fibra. Una alimentación con alto contenido de fibra disminuye el riesgo de diverticulitis. Los alimentos con alto contenido de fibras, como las frutas y las verduras frescas y los granos integrales, ablandan los desechos y ayudan a acelerar su movimiento a través del colon. Comer semillas y nueces no se asocia con el desarrollo de diverticulitis.
  • Beber abundante líquido. La fibra actúa al absorber el agua y aumentar la cantidad de materia fecal suave y abultada en el colon. Sin embargo, si no tomamos una cantidad adecuada de líquido para reemplazar lo que se absorbe, la fibra puede producir estreñimiento

¡Beber líquido, hacer ejercicio y comer fibra también ayudarán al control adecuado de nuestras glucemias, son muchos los motivos para tener en cuenta estos consejos!

Su médico es su referente, asegúrese de seguir sus indicaciones y visitarlo periódicamente. Ante cualquier duda consulte con su médico tratante. Código de aprobación: MAT-AR-2100888 1.0/05.2021